Dejando a un lado los espejismos, hablemos de los "espejismos" que todo o casi todo el mundo tiene, cuando al probarse ese conjunto
súper divino, al mirarnos en el espejo nos entran ganas de salir corriendo y ponernos a dieta.
En realidad... por métodos gráficos es fácil averiguar si nos están engañando con nuestra perfecta silueta.
Para determinar
gráficamente la imagen obtenida en los espejos esféricos, hemos de considerar un objeto
lineal B1A1 (esta notación la utilzamos en el primer dibujo, en el segundo la notación será A1B1) situado verticalmente sobre el eje óptico y trazaremos dos de los siguientes rayos que parten de B1.
- Un rayo paralelo al eje y que se refleja pasando por el foco F.
- Un rayo que pasa por el centro de curvatura C y se refleja volviendo sobre su trayectoria, sin desviarse.
- Un rayo que, al pasar por el foco F, se refleja paralelamente al eje.
ESPEJOS CÓNCAVOS.
Según la posición del objeto, la imagen será mayor o menor y resultará derecha o inveritda respecto a él:
- Si el objeto está a mayor distancia del espejo que el centro de curvatura, la imagen es real, invertida y de menor tamaño que el objeto.
- Si el objeto está sobre el centro de curvatura, la imagen se forma en el centro de curvatura, es real, invertida y del mismo tamaño que el objeto.
- Si el objeto se encuentra entre el centro de curvatura y el foto, la imagen es real, invertida y de mayor tamaño que el objeto.
- Si el objeto se sitúa en el foco, no se forma imagen o ésta se forma a distancia infinita, ya que los rayos reflejados son paralelos y no se cortan.
- Si el objeto está entre el foco y el polo del espejo, la imagen es virtual , derecha y de mayor tamaño que el objeto.